viernes, 17 de abril de 2015

Star Wars Episodio VII: El Despertar de la Infancia



Viendo el segundo teaser, y esto creo que no soy el único, sentí emociones encontradas, yo cuando veo algo que me emociona me río llorando, porque es algo que tanto tiempo añoré y que ahora lo voy a poder ver. El hecho de que George Lucas vendiera su franquicia a Disney por 4 mil millones de dólares al principio no me gustó, pero razonando me di cuenta que lo que tanto me acompañó en mi vida va continuar, que no va haber 20 años o 10 de descanso, y los fans esperando a que salte un adelante, algo de lo que seguir mamando. Sino que ahora podremos tener continuaciones y cosas de las que debatir respecto a esto.

Por eso, para un chico que en su infancia no tuvo amigos y que recién los tendría en la adolescencia, estas películas, como Star Wars, Indiana Jones, Volver al Futuro, comics de Marvel y DC, etc, me fueron una compañía de la que no tenía de la gente porque no me interesaba conocer, yo era y soy feliz leyendo eso. Prefiero quedarme leyendo rarezas de las películas que estando en Baum tomando un viernes por la noche. Y no lo digo en el sentido "mirenme soy un Sheldon Cooper", no, me parece una idiotez el etiquetar en ese sentido a la gente que ya es grande y sigo leyendo comics. No es volver a ser un adolescente, los adolescentes de ahora se tocan entre ellos y salen a bailer, esto es una forma de afrontar a la adultez. ¿Porque la ignoramos y pensamos en que la infancia fue nuestra mejor etapa? No creo, algunos si, yo por mi parte digo que no. Es seguir respetando y acompañando al niño que fui alguna vez que veía a Wolverine y en el colegio se pegaba lapices para tener garras. Que no tenía plata para comprarse figuras de Star Wars y gastaba block de hojas haciendo un X-Wing.

Star Wars me hizo creer que el mal puede ser más atractivo pero no es más poderoso que el bien como dice Yoda. Yo tengo un síntoma post-película que veo y me encantó: me creo por un tiempo un personaje. Me pasó con "A Few Dollars More" de Sergio Leone (usando un sombrero y creyéndome Clint Eastwood), "Singin in the Rain" (un Gene Kelly con menos capacidad para bailar que Stephen Hawkin) y otras más. Con Star Wars me creo que soy un Jedi todos los días y eso me hace hacer actos buenos: ofrecer boleto en el colectivo, ayudar a una anciana a cruzar la calle, cederle el lugar a una mujer, etc. Son estupideces de mi cabeza porque a fin de cuentas es una película. Pero eso me convierte en una mujer persona porque me mueve a hacer el bien.

Y ese es el objetivo del arte, maravillar y movilizar. Así que nos vemos el 15 de Diciembre en los cines, volviendo a ser un niño y tratar de ser un mejor adulto.

May the force be with you...always.

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